The rise of China and the US-Western Europe alliance: A crack in the liberal building?

El sistema de alianzas es el único elemento del poder estadounidense que China no puede ni está dispuesta a superar en un futuro previsible. Sin embargo, en la última década, el ascenso de China ha planteado un desafío a la alianza transatlántica en forma de un posible alejamiento de la alianza que no ha sido abordado por la literatura existente. Los aliados de Europa Occidental de los Estados Unidos no han dudado en adoptar en ocasiones una postura contraria a los intereses de Washington, pero en otros momentos, aún mantienen una posición similar a la de los Estados Unidos cuando se trata de lidiar con China. Este artículo sostiene que la presencia de preocupaciones de seguridad es lo que en gran medida les impide adoptar una posición favorable a China. Esta conclusión se alcanza después del examen de tres factores (oportunidades económicas, preocupaciones de seguridad y presiones de Washington) en el comportamiento de Alemania, el Reino Unido, Francia, Italia y España en tres casos cruciales para el equilibrio de poder entre Washington y Pekín: el AIIB, el BRI y el 5G de Huawei. La evolución de sus respuestas sugiere que el ascenso de China, una vez un aspecto divisorio entre aliados, tiene el potencial de convertirse en una fuente inesperada de unidad para la alianza transatlántica.