Resumen
Uno de los rasgos de la novela Del amor y otros demonios (2012) de Gabriel García Márquez que más pueden llamar la atención de un lector contemporáneo es la inclusión de versos de Garcilaso de la Vega, el poeta toledano, en la prosa del premio Nobel colombiano. No ocurre
lo mismo con el lector del Quijote, quien está habituado a que Miguel de Cervantes incorpore en la suya textos poéticos de diferente origen: versos de romances (caballerescos o no), y versos –y aun estrofas- de Ariosto, Ercilla, Juan de Mena, Jorge Manrique y, con mayor frecuencia, Garcilaso de la Vega.
Que García Márquez y Cervantes hayan coincidido en esta preferencia por Garcilaso es un dato que merece explorarse, así como la circunstancia de la inclusión de versos en la prosa de ambas novelas. ¿Cómo deben leerse los textos así configurados? ¿Cómo verso? ¿Cómo prosa? Y, asunto no menos importante: ¿cumplen los versos así interpolados alguna función? ¿Cumplen varias? Nos proponemos presentar estas cuestiones y aventurar algunas explicaciones.
Gabriel García Márquez incluye versos de Garcilaso fundamentalmente en el discurso de uno de los personajes de su novela: el Padre Cayetano Delaura. Delaura “[…] estaba convencido de que su padre era descendiente directo de Garcilaso de la Vega, por quien guardaba un
culto casi religioso” (81). La remisión petrarquesca de su apellido –“De + Laura” , Laura es la amada de Francesco Petrarca- y la circunstancia de que el amor vivido entre Delaura y Sierva María sea un amor sexualmente no consumado, permiten clasificar la relación entre los amantes como amor cortés o cortesano.
lo mismo con el lector del Quijote, quien está habituado a que Miguel de Cervantes incorpore en la suya textos poéticos de diferente origen: versos de romances (caballerescos o no), y versos –y aun estrofas- de Ariosto, Ercilla, Juan de Mena, Jorge Manrique y, con mayor frecuencia, Garcilaso de la Vega.
Que García Márquez y Cervantes hayan coincidido en esta preferencia por Garcilaso es un dato que merece explorarse, así como la circunstancia de la inclusión de versos en la prosa de ambas novelas. ¿Cómo deben leerse los textos así configurados? ¿Cómo verso? ¿Cómo prosa? Y, asunto no menos importante: ¿cumplen los versos así interpolados alguna función? ¿Cumplen varias? Nos proponemos presentar estas cuestiones y aventurar algunas explicaciones.
Gabriel García Márquez incluye versos de Garcilaso fundamentalmente en el discurso de uno de los personajes de su novela: el Padre Cayetano Delaura. Delaura “[…] estaba convencido de que su padre era descendiente directo de Garcilaso de la Vega, por quien guardaba un
culto casi religioso” (81). La remisión petrarquesca de su apellido –“De + Laura” , Laura es la amada de Francesco Petrarca- y la circunstancia de que el amor vivido entre Delaura y Sierva María sea un amor sexualmente no consumado, permiten clasificar la relación entre los amantes como amor cortés o cortesano.
Idioma original | Español |
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Páginas (desde-hasta) | 98-109 |
Número de páginas | 12 |
Publicación | Inti: revista de literatura hispánica |
N.º | 83/84 |
Estado | Publicada - 2016 |